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Las necesidades de un usuario que se plantea comprar un exprimidor profesional de naranjas son muy distintas de las que tienen los consumidores domésticos. Principalmente necesitan un aparato que sea capaz de exprimir mucha cantidad de fruta al cabo del día, operar mucho tiempo sin descanso, y también de la manera más automática posible, para que el propietario o encargado del negocio pueda ocuparse de otras labores mientras se exprime el zumo.
Por eso consideramos necesario hacer una reseña por separado de los exprimidores industriales. Ello no significa que no te puedas comprar un exprimidor profesional para tu casa, si tu presupuesto y el tamaño de tu cocina te lo permiten, pero está claro que el público objetivo de este tipo de aparatos es diferente del que encontramos en los domésticos.


¿Qué características debe tener un exprimidor de naranjas profesional?
Un exprimidor de zumo profesional está claro que tiene una serie de cualidades que lo diferencian de los aparatos domésticos, al mismo tiempo que hacen en muchos casos inviable (o poco recomendable) su compra para usar en casa. Estas son algunas de ellas:
- Al estar pensados para ubicarse en negocios, suelen estar hechos de acero inoxidable (o llevar muchas piezas de este material). Son aparatos que necesitan ser más resistentes y durables.
- El principal objetivo de un exprimidor profesional es exprimir mucha fruta más rápido.
- Tienen que ser aparatos de funcionamiento automático, o con mucho mayor grado de automatismo que uno doméstico.
- Como se deriva de todo lo anterior, son utensilios mucho más caros que los exprimidores para casa.


Podemos distinguir por lo general dos tipos de exprimidores de zumo profesionales: los eléctricos, que suelen ser de funcionamiento automático, y los manuales, que suelen ser de palanca. Vamos a conocer cada uno de ellos a continuación:
Exprimidores industriales de palanca
Los exprimidores profesionales de palanca son exprimidores manuales. Como podemos ver en las imágenes, son utensilios de acero inoxidable que exprimen el zumo de las frutas por el método del prensado. Son muy rápidos, ya que no hay más que bajar la palanca hacia abajo; con un solo movimiento exprimen la naranja de una vez. Su principal virtud es que dan un resultado muy bueno, un zumo muy puro y bien filtrado, con poco esfuerzo.
Ventajas de los exprimidores industriales de palanca
- Son muy económicos.
- Suelen ser piezas únicas 100% de acero inoxidable.
- Ocupan poco espacio en comparación con un exprimidor eléctrico comercial.
- Buena calidad de zumo, filtrado y puro.
A cambio, tienen la desventaja de que necesitas cortar primero la fruta por la mitad y colocarla en el cono de prensado.


Ojo porque, aunque resulte paradójico, los exprimidores de palanca eléctricos no se consideran profesionales: son rápidos, pero necesitan que el usuario esté accionando la palanca continuamente para que funcionen, y por tanto no son muy prácticos para usar en un establecimiento de hostelería.
Exprimidores industriales eléctricos
Un exprimidor eléctrico profesional es un gran electrodoméstico de uso puramente comercial, y es la opción más recomendables para establecimientos de hostelería de cierto tamaño (bares, cafeterías… sitios donde se sirvan muchos desayunos),
Hablamos de ellos con más profundidad en nuestra guía de exprimidores automáticos, ya que su principal virtud es justamente esa: el encargado del negocio solo tiene que pulsar un botón, y en pocos segundos tendrá el zumo ya servido en el vaso del cliente. Sin preocuparse de nada más.
Ventajas de los exprimidores industriales eléctricos
- Gracias a su bandeja-depósito superior, permiten exprimir una gran cantidad de naranjas sin intervención humana. Estas bandejas tienen capacidad para varios kilos de naranjas, y solo hay que preocuparse de reponer la fruta de vez en cuando.
- Solo hay que pulsar un botón para que salga el zumo. Un exprimidor eléctrico industrial se encarga de manera automática de coger las naranjas, cortarlas, exprimirlas, filtrar el zumo hacia la salida y descartar las cáscaras hacia el contenedor de desechos. Su filosofía es parecida a la de un exprimidor de tomates.
En contraposición a estas ventajas, hay que señalar obviamente que su coste es muy elevado y también el método de extracción provoca a veces que el zumo no sea tan puro que el que obtenemos con uno de palanca. A veces, más que prensar estos exprimidores profesionales eléctricos trituran o destrozan las naranjas, y eso puede provocar que el zumo no quede igual de colado.
El exprimidor eléctrico profesional de Lacor
Hay un subconjunto de los exprimidores automáticos que no son tan costosos como los comerciales, y que funcionan de la misma manera aunque con la contraprestación de poder exprimir solo una mitad de fruta en cada servicio.
No son muchos los fabricantes que los trabajan, pero entre ellos podemos destacar el exprimidor eléctrico profesional de Lacor. Este modelo se considera un exprimidor profesional debido a su coste (más elevado que uno doméstico) y sobre todo a su funcionamiento 100% automático. El usuario solo tiene que pulsar un botón para que el zumo quede servido en pocos segundos en su vaso.
Estas son algunas de sus especificaciones técnicas:
- Carcasa de acero inoxidable.
- Cono exprimidor adaptable a diversos tamaños de fruta.
- Jarra de 400 ml. de capacidad.
- Protección anti-goteo para que no se escape el zumo y manche la encimera o la mesa.
- Pies antideslizantes de goma.
- Componentes desmontables y aptos para el lavavajillas.
- Compartimento recogecables.
- Exprimidor totalmente automático: la fruta se exprime pulsando solo un botón.
- Tecnología innovadora: Al pulsar el botón el cono se gira y se eleva. Mecanismo muy eficaz que exprime hasta la última gota.
- Cono universal exprime todo tipo de cítricos: pomelos, naranjas, limones o limas.
- Sistema de bloqueo de salida de zumo y protección anti-goteo. Sin salpicaduras: la tapa se mantiene cerrada durante el funcionamiento.
- Carcasa exterior de acero de máxima calidad, Pies de goma antideslizantes y Recogecable en la parte inferior.
Nosotros no lo recomendamos para establecimientos grandes (o que sirvan muchos desayunos al cabo del día), ya que estás obligado a cortar las naranjas por la mitad antes de exprimirlas, pero pueden ser una buena solución para negocios pequeños, que no puedan permitirse la inversión en un gran exprimidor comercial de los que hemos visto antes.
O también para usuarios particulares que quieran darse el capricho de disfrutar de un exprimidor automático en su casa a un coste relativamente moderado. Otra alternativa puede ser el exprimidor eléctrico profesional de Princess, con unas prestaciones muy similares y con una enorme jarra de 1 litro de capacidad,. Ya decimos que no existen muchos modelos de este tipo en el mercado español:
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